sábado, 16 de agosto de 2008

IDEARIO

Me da vértigo el punto muerto
y la marcha atrás,
vivir en los atascos,
los frenos automáticos y el olor a gasoil.
Me angustia el cruce de miradas
la doble dirección de las palabras
y el obsceno guiñar de los semáforos.
Me da pena la vida, los cambios de sentido,
las señales de stop y los pasos perdidos.
Me agobian las medianas,
las frases que están hechas,
los que nunca saludan y los malos profetas.
Me fatigan los dioses bajados del Olimpo
a conquistar la Tierra
y los necios de espíritu.
Me entristecen quienes me venden clines
en los pasos de cebra,
los que enferman de cáncer
y los que sólo son simples marionetas.


Me aplasta la hermosura
de los cuerpos perfectos,
las sirenas que ululan en las noches de fiesta,
los códigos de barras,
el baile de etiquetas.
Me arruinan las prisas y las faltas de estilo,
el paso obligatorio, las tardes de domingo
y hasta la línea recta.
Me enervan los que no tienen dudas
y aquellos que se aferran
a sus ideales sobre los de cualquiera.
Me cansa tanto tráfico
y tanto sinsentido,
parado frente al mar mientras que el mundo gira.


(Sacado del libro "Cuenta atrás")

lunes, 11 de agosto de 2008

Y entonces descubrí que siempre es necesario tener un plan B, para cuando el plan A no llega a cubrir todas nuestras expectativas.

domingo, 10 de agosto de 2008

Growin' old with you

I wanna make you smile,
Whenever you're sad.
Carry you around when your arthritis is bad.
All I wanna do,
Is grow old with you
I'll get you medicine,
When your tummy aches.
Build you a fire if the furnace breaks.
It would be so nice,
Growin' old with you
I'll miss you, kiss you
Give you my coat when you are cold.
Need you, feed you.
I'll even let you hold the remote control
So let me do the dishes in our kitchen sink
Put you to bed when you've had too much to drink
Oh I could be the man,
Who grows old with you
I wanna grow old with you

viernes, 18 de julio de 2008

Llueve..

Bueno la verdad es que voy a empezar a escribir sin tener idea de donde voy a terminar. Suelen ser peligrosos ciertos cócteles: noticias, soledad, cansancio, música, ideas, anhelos, melancolía, tristeza, conjugados son letales. El caso es que la mente humana no se detiene los viernes por la noche tampoco. Estos días han sido difíciles, lo suficiente como para terminar la semana con esas depresiones instantáneas, que nos dejan paralizados, en el medio de la vía. Son esos límites que uno atraviesa, donde nada tiene que ver con nada, y el tierno aleteo de la mariposa destiñe los colores del amor, provoca la debacle. Tal vez mañana no sea todo así. Pero hoy es hoy. Y hoy están sangrando los luceros. Estamos en los tiempos de nostalgia, donde se añora el pasado, donde se quiere volver, allí, donde todo era más sencillo, y siempre había una mano amiga, donde se podía salir de cualquier pesadilla con una copa de ron. Copas, risas, excesos. Pero ya no. Ya no hay noches de insomnio divertidas, sino amargas concesiones de tristeza. Fue tan pronta su llegada, nunca se retrasa, siempre viene a poner fin a una sonrisa. Tal vez es cuando más armados de valor estamos, y de repente "¡cataplum!". No quiero redundar. Pero ciertamente he sentido como los días me han traído hasta aquí, y no esperaba esto, en honor a la verdad. Siento otra vez aquel nudo atravesando mi yugular. Y esta sensación de soledad convirtiéndose en mi único aliado. Espero deje de llover, porque cada vez presiento caer con más brutalidad.

jueves, 17 de julio de 2008

Puedo..

Puedo contarles mil historias inventadas
Y puedo repetir cantidad de veces como estoy,
Puedo apurar el “bien” en mi boca, y puedo sangrar un “mal” en la mirada
Puedo redundar, extrañar, caminar y respirar.
Puedo hablar sin parar, decir cosas sin sentido.
Puedo disfrazarme y volverme a desnudar.
Y puedo dejar de pensar.
Reírme puedo y mirar sin mirar.
Puedo seguir escribiendo sin cesar.
Puedo dormirme y jamás despertar.
Y puedo despertar para no dormirme más.
Puedo simular que ya no espero.
Disimular que ya no quiero.
Puedo también gritar que no es así.
Puedo un si, y puedo un no.
Me puedo equivocar, y de una vez puedo acertar.
Puedo correr en cámara lenta.
Puedo ver las luces de la noche y sentir que todavía es de día.
Y ver los rayos del sol sediento y sentir el nocturno sobre mí.
Puedo más de lo que creo y no creo en nada.

_____________________________________ jim*




(escrito el 26 de septiembre de 2007)